“Todos han contribuido a mi salvación”, expresa Mercedes Proaño, al recordar su grata experiencia con la atención médica recibida en nuestro hospital durante dos meses y cómo el abordaje profesional cambió su calidad de vida.
Mercedes, de 47 años, ingresó a Emergencia a causa de una septicemia. Durante su tratamiento, se le diagnosticó unas fístulas vaginales y taponamiento del uréter derecho, por lo que recibió atención por parte de Ginecología y Urología.
Nuestra paciente recuerda la incomodidad que le generaba en sus actividades diarias, el no tener control sobre sus esfínteres y la necesidad de usar pañal a tiempo completo. “Ahora me siento libre y tranquila al salir a la calle”, dice Mercedes, quien fue sometida a una cirugía robótica a través del sistema DaVInci, para mejorar su condición.
Comenta que su recuperación ha sido inmediata y se siente agradecida por el trabajo de nuestros profesionales, de quienes destaca su calidad humana y empatía. “Agradezco a los auxiliares, enfermeros, médicos, a todos, porque hicieron de esta experiencia un momento memorable, no sólo para mí sino para todos los pacientes que pasamos por este hospital. Mil gracias por ponerse en nuestros zapatos y sentir lo que sentimos”.